Vivimos en un mundo rodeado de pantallas, pasando muchas horas frente a dispositivos digitales. Todos estos dispositivos emiten luz azul-violeta, y dado que nuestros ojos están protegidos contra esta sobreexposición, eso puede ser potencialmente dañino para sus ojos y su rutina de sueño. Nuestras lentes de pantalla tienen un recubrimiento especialmente desarrollado para proteger los ojos, bloquear la luz azul-violeta y evitar cualquier daño potencial.